QUIEN ERES TU... ¿UN ÁGUILA O UNA GALLINA?

QUIEN ERES TU... ¿UN ÁGUILA O UNA GALLINA?

Hemos recibido de parte de Dios una gran posición dentro de su creación desde tiempo inmemoriados, fuimos creados para ser dentro de nuestro planeta la luz, y esta siempre es colocada encima, en lugares altos para que alumbremos más territorio. Como lo dice en su palabra el apóstol Juan

Mateo 5:15

15 Ni se enciende una luz y se pone debajo de un almud, sino sobre el candelero, y alumbra a todos los que están en casa.

En la palabra prendemos como debemos estar los que confesamos que Jesucristo es nuestro salvador

Romanos 10: 8-10

8 Más ¿qué dice? Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón. Esta es la palabra de fe que predicamos:

9 que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo.

10 Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.

Entonces entendamos cual debe ser nuestra posición ante las circunstancias que nos están rodeando, será como la actitud de las gallinas o debe ser como las águilas veamos entonces que cualidades tienes.

LAS GALLINAS: Estas son aves que tienen una naturaleza gregaria, y que han perdido la capacidad del vuelo, gracias a la selección artificial del ser humano. Ella se distingue del gallo por de menor tamaña, y aparte de ello, su cresta es más pequeña, y carece de espolones.

Poco antes de morir, Jesús se detuvo a contemplar por un instante la capital del pueblo judío y dijo con tristeza:

Mateo 23:37

“Jerusalén, Jerusalén, la que mata a los profetas y apedrea a los que son enviados a ella..., ¡cuántas veces quise reunir a tus hijos, como la gallina reúne sus pollitos debajo de sus alas! Pero ustedes no lo quisieron”

En cierta forma estos hermosos animalitos de la creación de Dios tienen una actitud de protección hacia los suyos, aunque en el acto de la realización de ella, pierdan su vida, nos brindan grandes virtudes, y nos sustentan día a día, pero en una cierta forma su actitud está limitada, puesto que no pueden volar grandes distancias, y gozan con unas excelentes cuerdas bucales para realizar un ruido estruendoso cuando están en riesgo o ponen un huevo.

En cierta forma encontramos cristianos tipo gallina, los cuales aun teniendo conocimiento del poder que Dios nos ha entregado, pero al verse ante cualquier adversidad, salen huyendo, o solo hacen un ruido tremendo, pero su depredador a pesar del ruido los devora, y consume sin dejar tiempo a su perseverancia.

LAS AGUILAS: Tres palabras sirven para describir qué es un águila: belleza, majestuosidad y poder. Las Escrituras mencionan muchas veces a las águilas. Ver su inconfundible silueta era algo común en la Tierra Prometida.

Job 39: 27-29

27 ¿Se remonta el águila por tu mandamiento,

Y pone en alto su nido?

28 Ella habita y mora en la peña,

En la cumbre del peñasco y de la roca.

29 Desde allí acecha la presa;

Sus ojos observan de muy lejos.

Las águilas como las luces se encuentran siempre habitando en los picos más altos, para resguardarse de los depredadores y perseverar la conservación de su especie,

Por otra parte, la Biblia compara a quienes confían en Jehová con águilas. Dice:

Isaías 40:31

31 pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán.

El águila remonta el vuelo valiéndose de corrientes térmicas, columnas de aire cálido que suben desde el suelo. Cuando encuentra una de estas corrientes, extiende sus alas y asciende en círculos por el interior de la columna. No depende de sus propias fuerzas para ganar altura y desplazarse largas distancias. De igual modo, quienes esperan en Jehová pueden confiar en que él cumplirá su promesa de darles “el poder que es más allá de lo normal”

El águila al llegar a una edad donde sus alas son pesadas, su pico es débil, se enfrenta a una dura decisión, y es la de morir o restaurarse, la restauración es dolorosa, puesto que pierde la mayoría de su plumaje y además se tumba ella misma su pico y garras, y este proceso dura más de cinco meses.

Nosotros en muchas ocasiones como seres humanos nos encontramos ante esta difícil situación, pensamos que ya todo nos pesa, que ya todo está acabado, y que ya no hay nada que hacer, y es ahí en cuanto tenemos una decisión que tomar, y es la de ¡vivir o morir!, ósea eres gallina y mueres, o eres águila y te restauras. Nuestro señor Jesucristo con su muerte, renovó sus alas, tumbo su pico y paso por todo este proceso, entregándonos una posición privilegiada, en la cual debemos declarar que aceptamos el proceso de Jesucristo, y que en el ya somos renovados, nuevas criaturas dice la palabra.

1 Corintios 5:7

7 Limpiaos, pues, de la vieja levadura, para que seáis nueva masa, sin levadura como sois; porque nuestra pascua, que es Cristo, ya fue sacrificada por nosotros.

2 Corintios 5: 17

17 De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.

“Les bendigo y les invito a identificarse como un águila, con gran majestuosidad y poderío”